Dolor la peor de las sensaciones. Sufrimiento, angustia, malestar, paralización, odio, amor. Una sola palabra que alberga millones de emociones. Puedo sentir como caigo poco a poco en sus garras, como desgarran mi ropa y me dejan desnudo frente a él, mirándole a los ojos, notando sus dedos penetrando en mi corazón y arrancándolo sin consideración y sin miramientos. Corretea feliz con mi esencia en sus manos y devuelve al mundo con un actitud sombría. Le he alimentado y de nuevo me encuentro solo, rodeado de personas, pero solo. Puedo sentir aún su olor en mi nariz, como acecha para quitarme mi ser por completo, puedo oír como me susurra al oído que quiere algo más que quiere mi alma. Aun resisto, creo que puedo aguantar....
Me rindo a sus pies decaigo. Me tiemblan las piernas y mis lagrimas son sangre que me vacía dejándome inerte en el suelo. Una escena del crimen sin culpables, un rompecabezas policial. Un misterio archivado sin resolver y un rastrojo menos del que preocuparse.
Es una noche oscura, ni la luna potente y llena puede canalizar lo que siento, se esconde bajo las nubes huyendo de mi, de la bestia que emerge. Sabe lo que pasa con los hombre lobo, pero no sabe lo que pasa conmigo, es nuevo, es amor y odio.
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